lunes, 25 de octubre de 2010

Diario de un linfedema – Inicio de una nueva etapa

Ha pasado bastante tiempo desde mi última publicación en este blog, y han pasado muchas y grandes cosas en mi vida. Bueno, más bien ha pasado algo grande, maravilloso y fantástico en mi vida: ¡HE SIDO MADRE!
Tras un embarazo algo complicado, que me ha obligado a hacer reposo casi todo este tiempo, al final, por complicaciones de última hora, tuvieron que sacar a Héctor por cesárea en la semana 35. Por suerte, todo fue muy bien. El niño nació con 48cm y 2350g, tuvo que estar 3 días en la incubadora, pero al 4º dia ya me lo trajeron a la habitación, y al 5º día nos enviaron a cas a los dos.
A día de hoy, el bebé ya tiene 8 semanas, mide 56cm y pesa 4920g. Está hecho un tragoncete dormilón, lo que se traduce en el buen crecimiento que está presentando.
En cuanto a mí, tengo que decir que me encuentro muy bien, casi recuperada del parto, sin molestias por la cesárea, y, eso sí, con mucho sueño a todas horas del día, jeje. Porque el niño duerme bien, pero eso de darle pecho cada tres horas no es que me deje a mí descansar demasiado. Pero no me quejo, vale la pena sólo por verle la carita mientras come, sus bostezos cuando le entra sueño, su cara de satisfacción cuando está lleno de comida…. ¡aysss! no puedo evitar el amor de madre.
Volviendo al tema, quiero hablar de mi linfedema, que es el tema de este blog.
Tengo que decir que la pierna respondió muy bien durante el embarazo, prácticamente no se hinchó nada. A pesar de necesitar reposo durante todo el embarazo, sí me obligué cada dia a ir a la piscina a nadar (hacía unos 26 largos, excepto a partir del 6º mes de embarazo, que bajé el ritmo a 20 largos). Y hay que reconocer que la natación es un gran deporte apra mantener a raya el linfedema, tanto por el movimiento yel ejercicio, como porque la misma presión del agua ayuda a drenar aunque apenas te muevas en ella.
La peor parte apareció al final del embarazo, sobre la semana 30-31 sí noté que la pierna se empezaba a hinchar, pero básicamente a la altura del tobillo. Esta hichazón al principio desaparecía con algo de reposo, pero a medida que avanzaba el embarazo se hinchaba más, y costaba mucho que desapareciera la hinchazón. Es cierto que en la semana 32 me descubrieron hipertensión gestacional, de la cual me tuvieron que tratar con medicación, aunque no daba muy buen resultado. Día a día la tensión iba en aumento, al igual que la hinchazón de las piernas, que luego se amplió a que se hinchara mucho la cara y las manos.
A pesar de la medicación, y que cada 3 o 4 días aumentaba la dosis de antihipertensivo, la tensión no mejoraba. Finalmente, en uno de los controles me realizaron una prueba rápida de proteína en orina, y dio positivo, lo que señalaba que estaba sufriendo de preeclampsia, y ahí fue cuando mi ginecólogo decidió que había que sacar al niño antes de que ambos sufriéramos daños.
A pesar de todo el estrés de enfrentarse al nacimiento de mi hijo 5 semanas antes de tiempo, pensé en los seguidores de este blog, y le pedí a mi marido que me hiciera alguna foto de mis piernas, para que todo el mundo pudiera ver que, a pesar de todo, la hinchazón que tenía tampoco era nada exagerada.





linfedema en el dia del parto

linfedema- sala de dilatación

En estas fotos, tomadas mientras esperaba en la sala de dilatación a que quedara un hueco en algún quirófano, se aprecia la diferencia entre ambas piernas, aunque la diferencia se ve sobretodo a nivel de pies y tobillos, a la altura de la rodilla ya casi no hay diferencia. Además, en todo el embarazo, a pesar de la hinchazón, no apareció dolor en ningún momento, que era mi mayor problema, con lo que ni me enteré de la pierna.
Lo mejor de todo ha sido la recuperación, apenas pasados 15 días, ya me había recuperado casi del todo, sólo me quedaba un poco de inflamación, limitada a los dedos de los pies, como se ve en la siguiente foto:


Esa pequeña hinchazón en los dedos de los pies, a día de hoy ya ha desaparecido, sigo llevando la media, eso sí, porque además me siento más tranquila, aunque reconozco que en casa hay días que los paso enteros sin ponérmela. Sobretodo me siento mejor para salir a la calle, a pasear con mi hijo, el hecho de notar la sujección de la media me da tranquilidad.
Otra cosa que he notado es que he recuperado movilidad en la pierna, puedo doblarla mucho más, me cuesta menos agacharme, o ponerme en cuclillas (cosa que antes no podía hacer)…. yo creo que ahora lo noto más porque claro, al principio, con la operación, al ser reciente, iba mejorando poco a poco, pero era un proceso más o menos lento. Cuando más notaba la mejora por la operación de linfedema, me quedé embarazada, y, claro, las molestias del embarazo acabaron tapando la posible mejoría que seguía habiendo en mi pierna al estabilizarse ya los resultados del transplante ganglionar, con la nueva formación de anastomosis y canales linfáticos… etc. Pues claro, al pasar el embarazo, y volver mi cuerpo a su situación “normal”, ahora puedo notar todas esas mejoras.
No sé, hay cosas que ni había notado que no pudiera hacer antes, hasta que he visto que ahora las hago, como sentarme con las peirnas cruzadas (como los indios), o sentarme con esa pierna doblada bajo el cuerpo, o incluso sentarme con las piernas dobladas hacia el pecho… todo posturas que ahora me doy cuenta de que antes no podía hacer porque el linfedema lo tenía localizado, sobretodo, en la zona alta del muslo, lo que me impedía la mayor parte de movimientos que requirieran de doblar la pierna, por falta de flexibilidad en esa zona.
Hasta final de año no tengo que volver a la consulta del doctor, hasta que esté bien recuperada del embarazo, y supongo que entonces sí podré hacer la linfagammagrafía que debía haber hecho anteriormente, y que no se realizó al enterarme del embarazo.
Ya os seguiré contando, por ahora sólo quería decir que me encuentro bien, que el embarazo, parto y demás han ido estupendos, y que me he recuperado de todo de forma muy positiva.
Sigo alegrándome cada día de haberme operado, de haber caído en las manos del Dr. Masià, y haber logrado tan buenos resultados.